Perder a un personaje longevo pesa. Pesa en muchos sentidos y soy consciente de eso. Es cierto que he jugado muy poco y que cuando he jugado nunca he llevado mi personaje más de cuatro o cinco partidas. Pero cuando diriges, el vínculo entre DM y pj's es grande, en algunos casos más grande que entre el propio jugador y su alter ego. No en vano, un DM idea una partida, la equilibra y crea historias que puedan interesar a los jugadores, siempre teniendo en cuenta los personajes que estos juegan. Romper este equilibrio no es fácil en absoluto y cuando alguien particularmente carismático muere, el golpe es doble.
El domingo murió un gran personaje. Un personaje que era poco simpático, muy engreido y bastante irritante... vamos, lo que viene siendo un gran personaje. Con él murió parte de la ilusión de su jugadora y parte de la ilusión de la campaña... y es normal, y es sano. Los héroes se juegan la vida cada vez que descienden a una catacumba, cruzan un rio o atraviesan una maldita puerta. Si esto no fuese así, jugar no supondría un reto y desde luego no sería tan divertido.
Shit happens Laura. Jank era un gran guardabosques. Enmarca su ficha.
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1 comentario:
Sabias palabras, tron.
Iba a intentar añadir algo más a lo que has dicho, pero creo que tu ya has dicho todo lo que había que decir mejor que yo.
Has emocionado a Laura :)
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